La Organización Mundial de la Salud define como ciudades Amigables con las Personas Mayores a aquellas en las que “las políticas, servicios y estructuras, así como el entorno físico y social, están diseñados para apoyar y hacer que la persona mayor permanezca activa, es decir, que viva con seguridad, goce de buena salud y participe en la vida comunitaria”.

La Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores se basa en el concepto de envejecimiento activo de la población y surge como respuesta a dos tendencias: el envejecimiento de la población y el proceso de urbanización.

Objetivos

• Generar procesos de participación comunitaria.
• Introducir cambios en las diferentes áreas competenciales del municipio a fin de mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.
• Aprovechar al máximo todo el potencial que tienen las personas mayores, teniendo en cuenta en todo momento sus necesidades, percepciones y opiniones.

Comprometerse con este proyecto conlleva:

1.- Hacer una evaluación de la adaptación de Vitoria-Gasteiz a las personas mayores que se realiza a través de:

• Un diagnóstico descriptivo de la ciudad: características geográficas, de población, sociales, económicas, ambientales…
• Una investigación cualitativa, siguiendo la metodología indicada en el Protocolo de Vancouver, basada sobre todo en la experiencia vivida por las personas mayores respecto a lo que es y lo que no es amigable en la ciudad y lo que se puede hacer para mejorar.

2.- Adquirir el compromiso de mejorar, respondiendo a los problemas detectados.

Áreas de intervenciónLa Organización Mundial de la Salud indica aspectos esenciales que una ciudad debe cumplir para ser considerada Ciudad Amigable con las Personas Mayores y los agrupa en 8 áreas.

Fases
El proceso de incorporación y pertenencia a la Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores consta de las siguientes fases:

1ª fase. Planificación (2011-2013): Evaluación de la adaptación de la ciudad a las personas mayores y formulación de un Plan de Acción trienal para toda la ciudad, basado en los resultados de esa evaluación, que será presentado a la Organización Mundial de la Salud.

2ª fase. Ejecución (2014-2016): Ejecución del Plan de Acción.

3ª fase. Evaluación de los progresos (final del 2017): Presentación a la Organización Mundial de la Salud de un informe sobre los progresos realizados.

4ª fase. Mejora continua (2018-2022): Si se demuestra que se han hecho progresos, la ciudad pasará a una fase de mejora continua y se elaborará un nuevo plan de acción de otros 5 años de duración.