Me cuido activo
Summary
La iniciativa “Me Cuido Activo”, en colaboración con diversos socios como Fundación Luker, Fundación Saldarriaga Concha, Universidad de Caldas, Universidad Autónoma de Manizales, Ceder, Finafuturo – Actuar Microempresas, Confa y la Alcaldía de Manizales, se ha enfocado en proporcionar un modelo de cuidado integral para personas mayores. Con seis módulos adaptados a diferentes niveles socioeconómicos, aborda desde el cuidado personal hasta la promoción de hábitos saludables y el apoyo a proyectos productivos.
La implementación ha generado impactos positivos, medidos mediante la escala de Barthel, evidenciando mejoras en la autonomía de los participantes en actividades diarias y su participación en la comunidad. La virtualización en 2020 permitió continuar brindando apoyo durante la pandemia, destacando la adaptabilidad del proyecto.
Los socios colaboradores desempeñaron un papel crucial en la planificación y ejecución, subrayando la importancia de la colaboración interinstitucional. Lecciones aprendidas incluyen la necesidad de innovación y adaptabilidad, especialmente en situaciones de crisis, destacando la importancia de explorar nuevas formas de llegar a los beneficiarios. En resumen, “Me Cuido Activo” no solo ha mejorado la calidad de vida de las personas mayores, sino que también ha demostrado ser una práctica flexible y colaborativa, capaz de enfrentar desafíos inesperados y evolucionar según las necesidades cambiantes de la población objetivo.
https://www.saldarriagaconcha.org/modelo-de-cuidado-me-cuido-activo-2020/
Key facts
Older people in general
Adultos mayores de 60 años
Health, Long-term care
Bienestar social
Meet their basic needs
- Healthy behaviours (e.g. physical activity)
- Participation
Age-friendly practice in detail (click to expand):
Engaging the wider community
Other
Sector publico y privado
Older people helped to implement the age-friendly practice
En el marco de “Me Cuido Activo”, las personas mayores no solo son receptores de cuidado, sino participantes activos que desempeñan un papel fundamental en la configuración de estrategias adaptadas a sus necesidades específicas. Su contribución directa y experiencias individuales informan el diseño del programa, permitiéndoles no solo recibir apoyo, sino también ser agentes activos en la promoción de un envejecimiento saludable y significativo.
Looking back
El proyecto “Me Cuido Activo” enfrentó diversos desafíos a lo largo de su implementación. Uno de los principales obstáculos fue la adaptación a la virtualización en 2020, motivada por las restricciones impuestas por la pandemia. Para superar este desafío, se implementaron estrategias tecnológicas y plataformas virtuales, garantizando así la continuidad del programa y el acceso de las personas mayores a los recursos y apoyos necesarios durante el confinamiento.
Otro desafío significativo fue la diversidad de condiciones sociales entre los participantes. Para abordar esto, se aplicó un enfoque flexible y adaptable, permitiendo que el modelo se ajustara a las necesidades específicas de cada grupo de personas mayores. La colaboración estrecha con los socios involucrados fue clave para comprender las distintas realidades y garantizar la efectividad del programa en contextos diversos.
Asimismo, la respuesta a la pandemia también implicó desafíos logísticos y de coordinación, especialmente al trabajar con múltiples instituciones. La implementación de mecanismos de comunicación efectivos y la coordinación estrecha con los socios fueron esenciales para superar estos obstáculos y garantizar la coherencia en la entrega de los servicios.
En resumen, el abordaje de estos desafíos se basó en la flexibilidad, la tecnología, la adaptabilidad del modelo y la comunicación efectiva con los colaboradores y participantes. Estas estrategias permitieron a “Me Cuido Activo” superar las barreras presentadas por la pandemia y las diferencias sociales, asegurando así la continuidad y eficacia del programa.
