Entre las acciones que se promueven y consideran desde el municipio, se encuentran:

• Establecer las bases de atención, orientación y los procedimientos prácticos consideradas como estándares mínimos que deben ser impulsados y cumplidos por el personal de la Unidad de Atención y Protección a las Personas Adultas Mayores, en los servicios de prevención, recreación, ocupación social y restitución de sus derechos, todos ellos basados en la constitución Política del Estado y Normas Vigentes;
• Uniformar el proceso de atención a las personas mayores, mejorando la eficiencia en los servicios de ocupación social y la toma oportuna de decisiones con el enfoque de acceso a la justicia;
• Fortalecer la parte de decisiones de las y los usuarios, dándoles la oportunidad para que participen en su proceso de atención,
• Sistematizar y optimizar el registro de información del proceso de atención que facilite la evaluación de la misma, además de contar con una ruta de articulación interinstitucional de atención a personas mayores, a través de la aprobación de la Ley Municipal del Adulto Mayor;
• Fomentar la unión familiar entre hijos/as y padres, buscando una repuesta restaurativa de lazos emocionales y afectivos, así como la permanencia de las personas mayores en su núcleo familiar;
• Fomentar la participación de actividades recreativas, culturales y deportivas;
• Lograr al acceso a la educación, en cualquiera de sus niveles;
• Promover una atención en salud adecuada, para ello, se organizó su asociación de UPAM en nuestro Municipio, con el objetivo de planificar y ejecutar acciones recreativas, garantizando el derecho a la recreación, además del intercambio de ideas, así como actividades deportivas y terapias ocupacionales a través de huertos productivos de vegetales (ya que en nuestro medio es difícil el accesos a esos nutrientes que son muy importantes para las personas mayores), además de construir espacios de descansos con asientos cómodos.
• En relación con la política de vivienda, se aspira a que los precios de las viviendas y de los servicios esenciales (agua, luz, gas…) sean accesibles para las personas mayores, quienes, por lo general, tienen una pensión baja. También deben estar bien aisladas y climatizadas, así como con superficies lisas, pasillos lo suficientemente anchos para el paso de sillas de ruedas y baños, inodoros y cocinas diseñadas de manera acorde, para que de esta manera tengan una buena calidad de vida para su envejecimiento.