Formule objetivos para el año siguiente a partir de los objetivos a largo plazo y la política de la calidad. Tenga en cuenta que el año siguiente no tiene por qué ser el año civil. P. ej.: si actualmente estamos en abril, su año de calidad puede ir de abril de este año a marzo del año que viene. A menudo es sensato dejar que el año de calidad coincida con otros períodos de planificación importantes, como el año de presupuestos.

Basándose en estos objetivos, usted hará un plan anual de calidad en la siguiente actividad. Es, pues, importante mantener un número y un objeto y campo de aplicación razonables de los objetivos: deben poder alcanzarse en el plazo de un año. Tenga en cuenta la disponibilidad de los recursos humanos y otros tipos de recursos necesarios para hacer realidad los objetivos.

Divida los objetivos entre todos los aspectos del sistema de gestión de la calidad. Una buena estrategia es cumplir el marco de los elementos clave del sistema de gestión de la calidad: formule un número limitado/pequeño de objetivos para cada elemento clave que se deba cumplir antes del final del año.